29 de octubre de 2018

Desmontando mitos: vacuna de la gripe

Como profesional de enfermería veo todos los años, cuando llega la época de la campaña de vacunación antigripal, como mucha gente de mi entorno rechaza la vacuna por falsas creencias y mitos absurdos. En este post intentaremos echar por tierra varios de ellos de una forma simple y que no pueden volver a utilizarse:
SACYL


  • NO PUEDO VACUNARME PORQUE ESTOY EMBARAZADA: No sólo la vacuna de la gripe puede utilizarse en embarazadas, si no que además está recomendada. Si es tu caso, debes aprovechar la época de campaña antigripal para inmunizarte, ya que la vacuna se puede administrar en cualquier trimestre de la gestación.
  • ESTOY ACATARRADO Y NO PUEDO VACUNARME: Catarro, tos, resfriado..etc, son síntomas que por sí solos no contraindican la vacunación en ningún caso. Sólo si se presenta una patología con síntomas importantes en el momento de vacunación, es preferible esperar a que la enfermedad remita. 
  • EL AÑO PASADO ME VACUNÉ, ME DIO REACCIÓN Y ME ENTRÓ LA GRIPE: a ver, a ver....es posiblemente la excusa que más he oído y más rabia me da, porque la gente que la emplea suele estar convencida de que eso es lo que ha pasado. Primero: una gripe no es un resfriado, no es un catarro, no son unos mocos. Es una enfermedad infectocontagiosa que cursa con sintomatología diversa, fiebre importante, molestias gastrointestinales, dolor generalizado, debilidad, falta de energía, mareos, etc. La campaña de vacunación antigripal coincide en las fechas en las que llega el frío, por lo que es fácil que sea la época en la que también se produzcan mayor número de infecciones respiratorias. La vacuna de la gripe es una vacuna inactivada, es decir, no es capaz de producir la enfermedad por sí misma. Y además protege contra la gripe pero no contra el resfriado común, es decir, no evita que cojamos varios catarros a lo largo del invierno. La gente que sí ha padecido una gripe sabe perfectamente diferenciarlo de un síndrome catarral.  
  • YA ME VACUNE HACE X AÑOS, NO ME HACE FALTA VOLVER A VACUNARME: La vacuna de la gripe es estacional, es decir, cada año tiene  una composición distinta que protege frente a unas cepas del virus de la gripe y no frente a otras. Los virus también mutan, cambian y es necesario vacunarse anualmente para estar protegidos.
Esta entrada será ampliada a medida que surjan nuevas dudas sobre la conveniencia o no de la vacunación.


26 de mayo de 2016

Como mantener tu botiquín

Todos tenemos en nuestros hogares un pequeño botiquín con fármacos de uso habitual. Sin embargo...¿sabemos conservarlos en las mejores condiciones posibles?. Hoy vamos a dar algunos consejos para ello.


  • El botiquín debe estar situado en un sitio fresco (sin sobrepasar los 22ºC-25ºC de temperatura), limpio y seco. Por lo tanto, estancias como cocina y cuarto de baño no son las más adecuadas.
  • Debe estar protegido de cualquier fuente directa de luz y calor. Hay medicamentos muy sensibles a las altas temperaturas como supositorios, óvulos y cremas. Si al abrirlos el aspecto no es el que debiera, no se debe consumir. 
  • Siempre debe estar fuera del alcance de los niños. Tampoco debemos emplear para guardar las medicinas envases atractivos para ellos (cajas de galletas, bombones, etc). 
  • Cada medicamento debe permanecer en su envase original a fin de poderlo identificar correctamente y no haya confusiones. A veces dos medicamentos distintos pueden tener apariencias muy similares.
  • Los medicamentos líquidos (colirios, soluciones, jarabes) deben conservarse en posición vertical.
  • Debemos revisar de forma periódica la fecha de caducidad de cada medicamento y deshacernos de los medicamentos caducados de forma responsable a través del punto Sigre de nuestra farmacia. No debemos tirar medicamentos que no usemos o caducados a la basura o a través del fregadero.
  • También debemos tener en cuenta el método de conservación de cada fármaco antes de su almacenamiento: protegido de la luz, en nevera, desechar tras su uso, etc.
  • Los medicamentos termolábiles son aquellos que deben conservarse en nevera. Deberemos tener un recipiente adecuado para ellos a fin de que no se mezclen con los alimentos. La temperatura que deben mantener se sitúa entre 2ºC-8ºC, evitando la congelación.
  • Hay que tener especial cuidado con algunos medicamentos. Los colirios, una vez abiertos, deben conservarse en nevera. Además, anotaremos en el envase la fecha de apertura con el fin de desecharlos transcurrido un mes de la misma ( o la fecha indicada en el envase). Lo mismo pasa con jarabes reconstituidos y algunas pomadas, cremas y soluciones orales. Por otro lado, los bolis de insulina deben conservarse en nevera a excepción del que estemos usando, que se conservará a temperatura ambiente.
En definitiva, cuanto mejor conservemos nuestros medicamentos, más fácil, y eficaz será su uso. 






23 de octubre de 2015

Reflujo Gastroesofágico: Consejos para llevarlo mejor

Se denomina Síndrome de Reflujo Gastroesofágico (RGE) al paso del contenido del estómago hacia el esófago, pudiendo provocar éste sintomatología clínicamente importante y cambios en el tejido del esófago (esofagitis). 
El síntoma más frecuente es el ardor o pirosis, aunque a veces puede no dar molestias. También puede manifestarse con síntomas respiratorios como tos y sibilancias y molestias como ronquera, dolor al tragar los alimentos y sensación de globo en la garganta.
Una dieta rica en grasas puede empeorar los síntomas

Una vez establecido el diagnóstico, se deben deben seguir unas recomendaciones encaminadas a mejorar el desarrollo de la enfermedad y a disminuir las molestias. Éstas son:

  • Realiza una dieta baja en grasas y rica en fibra: fomentar el consumo de carnes magras, pescado, frutas y verduras y cereales en su forma integral.
  • Evita irritantes como la cafeína, menta y tabaco: favorecen la distensión del esfínter esofágico. 
  • Procura no comer ni beber nada dos horas antes de irse a la cama. No tumbarse tras las comidas. 
  • Evita el sobrepeso: origina un aumento de la presión dentro del estómago.
  • No emplees ropa que oprima el abdomen, evitando el cinturón apretado.
  • En la medida de lo posible, no levantar pesos elevados y evitar la flexión prolongada del tronco
  • Levanta la cabecera de la cama de 15 a 20 cm. 
  • Realiza varias comidas al día, entre 5 y 6, pero poco voluminosas. 
  • Sigue el tratamiento farmacológico prescrito por tu médico. 



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